(17 años antes) Facundo termina de hacer la carta y recolecta algunas fotos que tenía con Luz y las mete en un sobre. Cada foto que metía en el sobre era motivo para que una lagrima más recorriera su rostro porque recordaba cada momento que pasaron junto a ella. Al terminar de poner las fotos puso también en el sobre el chupete y el babero que Luz había comprado para su hijo antes de morir. Esa misma noche llevó el sobre con la carta a los nuevos padres de Dilan y se despidió con un beso a la mujer y un abrazo al hombre pronunciando solamente estas palabras:
- cuiden a mi hijo como lo hubiéramos hecho con su madre, como si ella hubiera estado aquí conmigo..- al decir eso dejó caer unas lágrimas y se fue hasta la estación de trenes. Al llegar el tren se arrojó e hizo que esa gran mole de metal terminara con su vida para poder reencontrarse con su amada.
Llegado el 14 de julio Dilan cumple 17 años, ya todo un muchacho. Recibió muchísimos regalos de sus tíos, abuelos, amigos y conocidos. Estaba muy contento porque había recibido muchas cosas de gran valor, dado que el gran poder adquisitivo de su familia le podía permitir darse algunos lujos. Pero había un regalo que iba a marcarlo de por vida. Un regalo de sus padre. Una carta…
Llegada la noche de ese mismo día sus padres le dijeron a Dilan que tenían una cosa que decirle, algo que una persona les pidió que se lo dijeran en ese día tan especial.
- Dilan, cariño, con tu padre tenemos algo que decirte- le dijo la madre al niño algo preocupada
- Ven hijo, deja ya eso para otro momento- le dijo el padre viendo que el chico estaba con su nuevo celular
- Qué pasa? Qué quieren ahora?- dijo el chico molesto porque no lo dejaban disfrutar de sus regalos
- Es algo muy importante, algo que debes saber- la madre le contestó tiernamente
- Ok- el chico se dirigió hacia ellos y dijo- Qué es eso tan importante que tienen que decir?
- Bueno hijo, es muy difícil para nosotros decirte esto en este día tan especial para ti, pero es algo que debes saber- Respondió el padre
- Cariño, tenemos que darte una noticia que puede caerte mal o que puede causarte daño- Acotó la madre. En ese momento el chico miró a sus padre preocupado y dijo:
- Qué me pasa? Estoy mal? – Una lágrima se deslizó rápidamente por el rostro de la madre mientras el hombre le tomaba la mano a su esposa y con la voz entrecortada dijo:
- Hijo, debes saber que eres adoptado – dijo el hombre con la mirada fija en su hijo
- Cómo?! Adoptado?! Por qué? Quién? – en ese momento rompió en llanto el joven y junto a él la madre
- Hijo, aunque no seas nuestro hijo de sangre… - el muchacho interrumpió a su madre antes de que termine la frase
- Qué? Me quieren como tal? Por qué no lo dijeron antes? Por qué justo el día de mi cumpleaños? Por qué?!
- Es que alguien muy especial en tu vida nos lo pidió que fuese así y nos dejó este sobre que contiene unas cosas para ti junto con esta carta- le respondió la madre
- No quiero nada! No quiero nada! – el chico corrió a encerrarse en su habitación y cerró la puerta de un golpe.
La noche pasó y el chico no pudo dormir por semejante noticia que recibió. Había algo que lo tenia mas que inquieto, lo que había en esa carta y en el sobre. Su curiosidad pudo mas que él y salió en búsqueda de esas cosas. Llegó al living, donde habían quedado tirados el sobre y la carta y los tomó. El sobre decía: “para mi querido hijo, de parte de papá”. Al leer esto el muchacho pensó que su padre de toda la vida (el padre adoptivo) hizo ese sobre y la carta con fines de explicar porque tardaron tanto en decirle lo que estaba pasando. Lo abrió y vio varias fotos de una pareja joven, al parecer la chica estaba embarazada y el joven de la foto era idéntico a Dilan. Sí, eran sus padres verdaderos, no cabía ninguna duda. Al ver eso al joven se le llenaron los ojos de lágrimas porque vio que era idéntico al otro muchacho, pero exceptuando dos cosa, el chico tenía un lunar en su mejilla derecha como el que tenía la joven de la foto y ambos, Dilan y la chica, eran rubios. El chico siguió observando las otras cosas que habían en el sobre y encontró una gran cantidad de fotos de la pareja y algunas cosas que al parecer pertenecían a Dilan cuando era el bebé de aquella pareja. Cuando vio esas fotos y esas cosas Dilan se preguntó qué podía llegar a decir la carta. Al observar detenidamente la carta tenía fecha del 24 de julio pero 17 años atrás y esa carta decía:
“ Querido hijo mío, quiero que sepas que te amo, te amé y te amaré por siempre como lo hice desde el primer momento en el que tu hermosa madre me comunicó de que iba a ser papá. No te imaginas que raro me sentí en ese momento porque ella tenía tan solo 16 años y yo como vos en este momento, 17.
Se que debe de ser difícil entender cómo un padre que ama a su hijo puede darlo en adopción, pero si entendieras que mi amor hacia vos fue tan grande que me llevó de poder hacerlo. Y estoy seguro que querrás saber porqué te dí en adopción.
Todo pasó un tiempo antes de que llegaras al mundo. El padre de tu madre la golpeó cuando ella le dijo que se mudaría a mi pequeña casa conmigo porque nos amábamos. Tuve que responder por ella y fui a casa del padre de tu madre a reprocharle por lo que le había hecho a ella y la discusión pasó a tener mas violencia, hasta llegar al punto en el que nos peleamos. Tu madre trató de separarnos y su padre la empujó para así poder golpearme. Ella cayó al piso y golpeó su cabeza contra el suelo con gran violencia. En ese momento dejé de lado la pelea para acercarme a tu madre y llevarla en brazos hasta la calle.
Un hombre muy bueno que pasaba en un auto aceptó a llevarnos al hospital. El golpe duro en la cabeza de tu madre le produjo grandes daños que fueron muy graves para ella. Los médicos creían que si ella seguía así vos podías llegar a morir dentro de su vientre por lo cual me recomendaron hacer una cesarea pero la que correría el riesgo sería tu madre. En ese momento no sabía que decidir, si la mujer que amo o al hijo de mi sangre.
Pasaron unas horas y un médico me dijo que ella podía permanecer con vida como máximo dos días más pero no fue así, tu madre 4 horas después de lo que me dijo ese medico dejo de existir en este mundo. Su cerebro murió y al corto tiempo su corazón tambien por lo que los médicos tuvieron que sacarte de inmediato de su cuerpo sin vida. Pero al realizar esa operación vos también parecías muerto, pasaron 4 minutos que parecieron una eternidad hasta que por fin diste señales de vida. Tu llanto que dio señales de que podías respirar fue un gran alivio, imaginate, perder a mi amada y también a mi hijo hubiera sido lo peor que me podía pasar.
Hoy ya hacen 17 años desde que la vida me dio dos emociones, la perdida de mi amor y la llegada de mi mayor orgullo a esta vida. Después del día en que naciste tuviste que estar 4 días internado y en la pequeña empresa en la que trabajaba no supieron entender lo que estaba pasando y me dijeron que muchos chicos como yo necesitaban ese trabajo y si al día siguiente no podía presentarme perdería mi empleo. No me presenté al día siguiente porque tenía que estar con vos dándote lo que necesitabas y haciendote companía pero no podía dormir pensando como haría hacer para que tuvieras un buen futuro, dado que ya no tenía trabajo, mi familia no me quería y mucho menos la familia de tu madre. De tanto pensar en eso me quedé dormido a tu lado.
Al despertar comencé a caminar dentro del hospital para despejarme un momento y gracias al destino conocí a las personas que te entregaron esta carta. La mujer había perdido su embarazo y el hombre se lo notaba muy triste. Fue en ese momento en el que se me ocurrió contarles mi problema para tratar de demostrarle a la mujer que todos teníamos problemas y que con esfuerzo y fé se podían superar. Ella me contó su historia y me di cuenta de que era una persona muy sufrida, tenía un sufrimiento muy grande que ni las mayores riquezas que parecía tener podían llenar ese gran vacío. Fue así que me di cuenta que ellos podían darte un mejor futuro, una mejor vida, no como yo que era tan solo un niño sin trabajo ni familia. En ese momento les pedí si podian adoptarte, así ellos podían tener el hijo que tanto anhelaban y vos una familia digna. Ellos me dijeron que sí y ese mismo día hicieron los tramites para poder adoptarte.
El hombre era abogado y tenia un gran poder adquisitivo y eso hizo que los tramites se hicieran mas rápidos. Y bueno, hoy a la mañana te entregué a ellos, con una condición, que en tu cumpleaños número 17 te entregaran estas cosas que te llegaron. Pero te juro que desde el momento en que ellos te llevaron tengo un gran vacio en mi. Ya no tenía a mi amada ni a mi hijo y sentía que mi vida ya no tenía mas sentido.
Con la mayor de mis fuerzas termino esta carta para decirte que tu madre y yo siempre te amaremos y cuidaremos siempre desde donde estemos.
Y una cosa mas hijo, si yo hice lo que hice fue por amor hacia tí. Porque no quería que cumplas tus 17 años con una vida sin futuro. Aunque mi decisión no me haya gustado porque mi deseo mas grande hubiera sido compartir mi vida con vos estoy tranquilo porque tu vida va a ser buena. Y por mi no te preocupes en buscarme hijo porque lo que mas quiero ahora es estar junto a tu madre. Así que desde arriba te estaré viendo junto a ella y te vamos a cuidar siempre. Hijo esta despedida me está destrozando por dentro asi que lo unico que quiero que sepas es que te amo profundamente.
Te deseo lo mejor hijito y portate bien. Ah me olvidaba, tu madre se llamaba Luz Ibañez y yo Facundo Escalada por si lo querías saber. Te amo, papá.”
Al terminar de leer la carta y al ver las fotos Dilan no podía parar de llorar, así que fue a lavarse la cara para tratar de tranquilizarse pero era prácticamente inutil dado que al verse al espejo su propia cara le recordaba a su padre y su lunar y pelo a su madre. Tan grande era su angustia que dibió recurrir a su madre. Entró llorando a la habitación de sus padres y abrazó tan fuerte a su madre que esta se dio cuenta de lo que estaba pasando. Su padre lo abrazó también y le dijo que sea fuerte que a sus verdaderos padres no les hubiera gustado que él esté mal porque a ningún padre quiere eso para su hijo. Dilan les dijo:
- los amo, con todo mi corazón- Y entre lágrimas los abrazó como nunca lo había hecho. Luego agregó con la voz entrecortada- y… ustedes saben donde están ellos?
- ellos? Son tus padres cariño, llámalos como se merecen. Y sí, sabemos donde están sus cuerpos por si quieres ir a visitarlos.
- sí, quiero – El jovencito pasó la noche entera con sus padres y al otro día a la mañana lo despertaron y le comunicaron de que debía cambiarse para ir a visitar sus padres.
Y fue así, ellos fueron al cementerio esa misma mañana. Dilan llevó flores para dejarles a sus padres pero algo le llamó la atención, habían muchas fotos de la infancia de él en el lugar donde se encontraban sus padres. Eso se debía a que los padres adoptivos de Dilan llevaban fotos de él como forma de demostrarle a sus verdaderos padres que su hijo se encontraba bien.
Al volver a la casa la familia permaneció en silencio. Esa misma noche Dilan no comio ni vio la tv, no salio de su habitación para nada y se pasó todo el tiempo pensando en sus padres.
A la mañana siguiente se desperto y fue a desayunar, al llegar al comedor se encontró con su madre y la saludó con un gran beso en la mejilla y le dijo que la amaba. Pasó el día y al llegar su padre lo recibio con un abrazo le dijo lo que pensaba de él como padre. Esta actitud hacia sus padres adoptivos se repitió todos los días. Dilan dejó de ser el chico sobervio que solía ser y comenzó a respetar y a disfrutar mas a sus padres. Todos los sábados a la mañana iba a visitar a sus padres difuntos dejándoles unas flores y algún recuerdo de él. Eso se volvio rutina haciendo de Dilan un mejor chico, respetuoso y menos materialista y más demostrativo con sus padres porque ni él como ninguna otra persona sabe cuando vamos a sufrir la gran perdida de las personas que nos dieron la vida o los que nos cuidaron como si ellos nos la hubieran dado.
